Eis as palavras do grande poeta, Federico García Lorca, que foram o suporte de inspiração para "Take this Waltz". Esta canção foi-me dedicada por Alguém virtual, que me conseguiu perturbar de um modo que se Tornou obsessivo, tornou-me por um tempo, que considero demasiado longo, uma mulher inquieta, Alguém que brincou ao "toca e vai embora" e nunca teve a coragem de a dançar comigo. Todos os actos da nossa vida Tem um preço, não são gratuitos ...
Um beijinho embrulhado para esse Alguém que afinal até perturbou os meus sonhos, que fez parte da minha vida ...
Vals Vienés Pequeno
Viena en diez muchachas de feno,
un hombro donde solloza la muerte
y un bosque de palomas disecadas.
Hay un fragmento de la mañana
en el museo de la escarcha.
Hay un salón con ventanas mil.
Ay, ay, ay, ay!
Toma este vals con la boca cerrada.
Este vals, este vals, este vals,
de sí, de muerte y de coñac
que moja su cola en el mar.
Te quiero, te quiero, te quiero,
con la butaca y el libro muerto,
por el melancólico pasillo,
en el oscuro desván del lirio,
en nuestra cama de la luna
y en la danza que sueña la tortuga.
Ay, ay, ay, ay!
Toma este vals de quebrada cintura.
En cuatro Viena hay espejos
donde juegan tu boca y los ecos.
Hay una muerte para piano
que pinta de azul a los muchachos
. Hay mendigos por los tejados
Hay frescas guirnaldas de llanto.
Ay, ay, ay, ay!
Toma este vals que se muere en mis brazos.
Porque te quiero, te quiero, amor mío,
en el desván donde juegan los niños,
soñando viejas luces de Hungría
por los rumores de la tarde tíbia,
viendo ovejas y lirios de nieve
por el silencio oscuro de tu frente.
Ay, ay, ay, ay!
Toma este vals del "Te quiero siempre".
En Vienne Bailaré contigo
con un disfraz que tenga
cabeza de río
. Mira qué orillas tengo de jacintos!
Dejaré mi boca entre tus piernas,
azucenas mi alma en fotografías y,
e en las ondas oscuras de tu andar
quiero, amor mío, amor mío, dejar,
violín y sepulcro, las cintas del vals.
Vi-a a comentar um blog que acompanho e tenho lido o que escreve. Uma avó(?) que se revela com esta sensibilidade não merece que a deixem partir. Embora lhe possa causar dor, ficou muito melhor, acredite.
ResponderEliminarRecolho um dos seus beijinhos embrulhados
Vasco P.
Vasco tal como já o fiz por e-mail, senti necessidade de agradecer-lhe, neste pequeno espaço, as palavras amáveis que me enviou.
ResponderEliminarCumpri o que me solicitou, transcrevi o seu comentário mas esqueci-me de pôr aspas.
Comentar directamente não é assim tão difícil, não me disse que acompanha outros blogues?
Desafio-o a voltar aqui e a fazê-lo directamente, sem recorrer ao mail.
Beijinho embrulhado enviado
é pena que se brinque assim...
ResponderEliminar